EL
MERCOSUR Y SUS NUEVOS HORIZONTES
Desde la campaña que lo llevó
hacia la presidencia a Mauricio Macri tuvo un discurso claro: reinsertar a la
República Argentina en el plano internacional. Según su visión, el país estuvo
durante años aislado, sin asumir un rol internacional preponderante que lo supo
caracterizar en el pasado.
Dentro de los planes de insertar
a la Argentina nuevamente en el sistema internacional, tomó como medida
impulsar al Mercosur. Recordemos que el Mercosur es una organización
internacional fundada en 1991, integrada por Argentina, Brasil, Uruguay,
Paraguay y Venezuela. Su objetivo principal es generar un espacio común para
crear oportunidades comerciales y de inversiones a través de la integración
competitiva de las economías nacionales al mercado internacional.
Desde su fundación, el
Mercosur experimentó momentos de gran expansión económica y otros en los que el
crecimiento se vio estancado, debido a crisis políticas y/o económicas internas
en los países miembros, y crisis internacionales que afectaron a nuestra región.
Durante los últimos años el crecimiento del Mercosur se encontró estancado.
Como causas se pueden mencionar la reciente crisis política de Brasil y
Venezuela, y la que anteriormente había experimentado Paraguay, con la
destitución del expresidente Fernando Lugo. A su vez, se produjo una gran
contracción económica en los países miembros, sobre todo Argentina, Brasil y
Venezuela.
Frente a esta situación, Macri
considera que es Argentina quien debe tomar el papel de líder regional (frente
a la crisis brasileña) y que el Mercosur debe expandir sus horizontes. La firma
de tratados de libre comercio con países fuera del bloque parece ser el recurso
que el presidente argentino está utilizando como estrategia. Por este motivo ha
habido grandes acercamientos con Estados Unidos, la Alianza del Pacífico y la
Unión Europea. Es un giro radical en la política exterior luego de los 12 años
de gobierno kirchnerista.
Con EEUU se comprometió a
aumentar los flujos comerciales entre el país norteamericano y los estados
miembros de la organización, y evitar la confrontación política que caracterizaron
a las relaciones del bloque con la potencia del norte durante los últimos
quince años.
La Alianza del Pacífico es un
bloque comercial que ha experimentado un gran crecimiento económico desde su
reciente fundación, en el año 2011. El bloque está compuesto por Chile,
Colombia, México y Perú. El mismo cuenta con tratados de libre comercio con las
grandes economías mundiales y su crecimiento económico fue muy superior en
comparación con el Mercosur. Por esta razón, la Argentina participó como país observador
durante las últimas sesiones del bloque, una forma de acercamiento hacia estas
economías en crecimiento.
El caso de la Unión Europea
representa una vieja voluntad del Mercosur, que en caso anteriores no llegó a
concretarse. El objetivo es la firma de tratados de libre comercio que le
permita al bloque sudamericano expandir el flujo de capitales y así mejorar la
economía regional. Para esto, el presidente argentino se encuentra realizando
una gira en el continente Europeo, para poder acelerar las negociaciones. Las
mismas no resultan ser sencillas, teniendo en cuenta la crisis migratoria y
política de Europa, que se acentuaron luego del BREXIT. Como condición para que
las negociaciones resulten exitosas, la Unión Europea pidió a la Argentina que
acepte a 3000 refugiados sirios.
Sin dudas que se vive un
cambio de época en la región sudamericana. La búsqueda de alternativas para
superar el estancamiento económico se puede apreciar a simple vista. Sin
embargo, estos cambios no resultan sencillos y el éxito de los mismos no está
garantizado. Como principal obstáculo la crisis política venezolana y brasileña
son una gran carga para la organización, ya que generan desconfianza a nivel
internacional y ahuyentan las necesarias inversiones. El destape de los casos
de corrupción de los países miembros también es un gran problema para la
expansión del bloque. Por último, las condiciones de la UE generan cierta
incertidumbre y dudas, sobre todo por el financiamiento de la acogida de los
inmigrantes, la inserción de los mismos y las medidas de prevención terrorista
que esto implicaría.
El cambio de rumbo que ha
tomado la organización es notable y tal vez sea necesario debido a la parálisis
económica que sufrió durante los últimos años, pero el éxito de estos cambios
aún es un misterio difícil de predecir.
Por Juan Francisco Chavez